PABLO GIANERA: “LA POLÍTICA ES EL BESO DE LA MUERTE DEL ARTE”


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PABLO GIANERA: “LA POLÍTICA ES EL BESO DE LA MUERTE DEL ARTE” Compartí

Entrevista a Pablo Gianera,
periodista, crítico de arte y profesor de la Diplomatura en Cultura Argentina

 

Infobae — Pablo Gianera es un intelectual de una erudición desbordante. Autor de, entre otros títulos, Formas frágilesLa música en el grupo Sur y Componer las palabras, podría decirse, parafraseando el prólogo de Borges a La invención de Morel, que no es una imprecisión o una hipérbole calificar sus ensayos de perfectos.

En cada libro propone una visión del arte, de la música y de la poesía, que revela una ética, una estética, una política, una tensión artística que habría pasado desapercibida o, al menos, no lo suficientemente subrayada. Gianera logra algo que, en general, le atribuimos a los clásicos: una cierta sensación de infalibilidad, de que nada de lo que escribe corresponde al azar o la casualidad.

Como Piglia, como Fogwill, como Chitarroni y tantos otros, sostiene la fe en el diálogo como una forma de verdad; sus libros, de hecho, parecen ser conversaciones en donde el lector se ve obligado —o, mejor dicho: invitado, porque aún con sus “opiniones contundentes” cultiva el understatement borgiano— a tomar posición.

En un encuentro de Experiencia Leamos, el ciclo que la plataforma Leamos.com organiza como beneficio exclusivo para sus suscriptores, Pablo Gianera habló con Patricio Zunini de estas obsesiones a las que vuelve cada vez: la función de la crítica, los límites de la experiencia estética, los proyectos de las vanguardias, el futuro del arte.

La entrevista completa puede verse en el sitio de Experiencia Leamos. Publicamos aquí, algunas de las observaciones de Gianera:

[…] La experiencia estética en tiempos de cancelación

“Estos acontecimientos, como lo que sucedió con El viento se llevó —y hubo muchos antes también; por ejemplo, hubo varios casos en la ópera que trataron de cambiar personajes que por razones políticas resultaban inconvenientes o, para usar la palabra de moda, incorrectos—, son graves porque no tienen que ver con un tipo de contemplación o una experiencia o un juicio, si no que hay una tentativa de modificarla obra y pretender que diga algo que no dice. Uno no puede hacerse una obra de arte a su medida. En todo caso, si uno quiere corregir o rectificar una obra de arte debería hacer otra que discuta con la anterior. Las dos tentativas me parecen bastante estúpidas. Lo que pasa que la primera es particularmente severa. Si nosotros no nos regimos por el mismo sistemas de valores, no veo por qué eso debería modificar la obra en sí. Es triste que la discusión estética se convierta en una discusión de una política tan poco imaginativa o tan chata”…

 

 


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