En esta edición: Ceferino Reato*

 

¿Qué lo llevó a escribir su último libro “<<Salvo que me muera antes>>: el día en que murió Kirchner y nació el cristinismo” ?

Luego de los libros sobre la violencia política en los 70, quise escribir sobre hechos más actuales. Primero, me ocupé de la gran crisis de 2001/2002 en “Doce Noches”, y ahora de uno de los productos políticos de esa hecatombe: el kirchnerismo. Como es un libro periodístico, parto de un hecho conmocionante, como fue la muerte del ex presidente Néstor Kirchner, para dar una mirada sobre los doce años y medios en los que se sucedieron tres gobiernos kirchneristas.

 

¿Qué quiso mostrar con su escritura?

Suelo ser ambicioso, lo que no significa que logre cumplir con mis objetivos. En primer lugar, investigué la muerte de Kirchner, que estaba, y sigue estando, atravesada por múltiples versiones. Una de mis hipótesis es que el día de la muerte del ex presidente, terminó también el kirchnerismo y nació algo nuevo, que es el cristinismo, entendido como la primera vez que la llamada izquierda nacional llegó a la cúspide del poder político. Esa fase terminó mal, con una derrota electoral, aunque por pocos puntos y a pesar de que el segundo gobierno de Cristina fue francamente malo, lo que demuestra que ese pensamiento, que para mí es anacrónico, tiene fuerza en un sector de la opinión pública. Es populista pero, a esta altura, creo que el populismo no significa mucho; por eso, utilizo más el concepto de democracia plebiscitaria; una democracia iliberal, poco republicana. Otro objetivo fue mostrar cómo decidían los Kirchner, Néstor y Cristina, que eran/son distintos. En el caso de ambos, me interesó también hurgar en el complejo y siempre vigente tema de la relación entre los políticos y el dinero, especialmente a partir de una frase de Néstor: “Paso a paso y pesito a pesito”.

 

 

En algunos momentos críticos se pueden advertir elementos que habitualmente pasan desapercibido pero que son significativos. ¿Qué llamó su atención al investigar este momento sensible de la política?

Un elemento que me parece clave al menos en la Argentina es la importancia del liderazgo del presidente o la presidenta de turno. De allí la importancia del velatorio a cajón abierto en El Calafate, el mismo día de la muerte de Kirchner, cuando Cristina convenció, con sus modos y su lenguaje, a los principales dirigentes del peronismo que ella podía hacerse cargo del oficialismo y del gobierno, ya sin la tutela de su poderoso marido. Era una mujer en un gobierno de hombres, como sucede siempre en nuestro país. No había reparado en ese detalle, que me permitió comprender por qué su liderazgo caía tan bien en muchas mujeres jóvenes.

 

¿Cuál le parece que puede ser el aporte que brinda esta investigación?

Creo que en la historia hay más continuidades que rupturas. Los Kirchner son dos productos auténticamente argentinos, expresan nuestros talentos y nuestras miserias. Espero que este libro sirva para colocar al kirchnerismo en esa continuidad histórica. Entiendo que han sido un producto de la gran crisis de 2001/2002 y que el agotamiento del modelo que proponían explica el vuelco de la mayoría electoral a una opción diversa, encarnada por el presidente Mauricio Macri.

 

Cuándo un libro se publica deja de ser del autor ¿Qué advierte en los lectores sobre su recepción?

Cada lector hace una lectura particular, que a veces no tiene mucho que ver con la intención del autor. Cada lector completa el libro. En este caso, es un libro que no ha caído bien en los extremos de la grieta. A los kirchneristas no les gusta porque desmitifica a Néstor Kirchner y analiza hechos que les disgustan, como la habilidad de Cristina para convertir una tragedia en un espectáculo político; me refiero al velatorio a cajón cerrado en la Casa Rosada, que le dio 20 puntos de imagen positiva. Al año siguiente, ganó la reelección en primera vuelta, con el 54,11 por ciento de los votos. A los antiK, el libro también les molesta: a ellos les habría gustado que yo escribiera que Néstor fue muerto a balazos por su hijo cuando descubrió que estaba maltratando a Cristina, que es una versión bastante difundida en esos ámbitos. Lo siento, pero no es eso lo que recogí de las entrevistas con quienes estuvieron aquel día, el 27 de octubre de 2010. O que el velatorio en la Casa Rosada se realizó sin el cuerpo de Néstor. Siempre recuerdo que en una charla con las damas del Circolo Italiano, una institución que aprecio mucho, le dije a una de las asistentes que las fuentes me habían dicho otra cosa, que el cuerpo de Néstor sí estaba dentro del ataúd. Y que, en todo caso, no veía cuál podía ser el objetivo de Cristina para reabrir el cajón, sacar el cuerpo de su marido, y realizar el velatorio con el ataúd vacío. “¡Es que Cristina era capaz de cualquier cosa!”, me contestó. Es difícil vencer este tipo de creencias, pero no me sale escribir libros para fanáticos.

 

Ceferino Reato es profesor en la Diplomatura en Cultura Argentina. Es periodista y licenciado en Ciencias Políticas. Conduce junto a Clara Mariño el programa A fuego lento (Canal 26). Autor de numerosas obras.

 

 

El 07 de septiembre de 2017, organizamos la presentación de este libro, la que se llevó a cabo junto a su autor y Jaime Durán Barba en el Colegio San Pablo de la Ciudad de Buenos Aires.

 

Cobertura del evento en otros medios: https://www.infobae.com/politica/2017/09/07/jaime-duran-barba-el-kirchnerismo-expresa-un-fenomeno-social-de-fondo/