“Blackie, promotora del diálogo interreligioso”, por ROBERTO BOSCA
Clarín – Cuando escuchamos hablar del diálogo entre las religiones, nos imaginamos un grupo de cardenales y rabinos; difícilmente pensamos en una cantante de jazz nacida en una colonia judía del litoral que llegó a ser una de las grandes estrellas de la radiotelevisión.
Su nombre imprimió una huella a toda una época: Paloma Efron, conocida popularmente como Blackie. Aunque no fue una creyente, ella abriría un camino en el diálogo interconfesional. Sin asumir una postura religiosa pero tampoco antirreligiosa, Blackie era agnóstica y estaba dotada de una brillante personalidad, pero sobre todo la distinguía un espíritu profundo que albergaba una enorme fe en la condición humana.
De otra parte, lejos estaba de establecer distinciones según la identidad racial, social o religiosa de las personas, puesto que apreciaba otros rasgos como la sensibilidad, la inteligencia o el talento. Si bien Blackie rechazaba la idea de un Dios exclusivo, esto no le impedía dejar de valorar la conjunción de la tradición judía con la cristiana y lo prueba el hecho de que promovió la Casa Argentina en Israel-Tierra Santa…
Paloma Efron, conocida como «Blackie» (1912-1977), periodista, conductora pionera de la radio y televisión argentina, y en sus comienzos, cantante de música jazz.
ROBERTO BOSCA,
profesor de la Diplomatura en Cultura Argentina y director a académico del Instituto de Cultura
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